Celulitis ¿Cómo perder líquidos?

Básicamente, la aparición de la celulitis en la piel se debe a la acumulación de grasa y retención de líquidos en ciertas zonas del cuerpo, la cual generalmente suele ser complicada erradicar o no, dependiendo del individuo.

Sin embargo, la manera más eficiente de eliminar esta acumulación de grasa que se ha atrofiado, es quemándola, utilizando ese combustible con ejercicios. El mismo enfoque  deberá aplicarse a los líquidos y las toxinas que puedan estar en estas zonas, con una buena alimentación, abundante agua, y actividad física que además de fortalecer la musculatura, quemar la grasa, también ayude a estimular el sistema linfático, de manera a eliminar eficientemente estas toxinas junto con los líquidos.

Con respecto a lo que se debe y no consumir, deben limitarse o evitarse los alimentos grasos de origen animal como lácteos, carnes, embutidos; también aquellos muy refinados o  azucarados. Igualmente con la sal, cuyo consumo debe ser reducido o reemplazado con limón.

Modifique su dieta introduciendo en ella muchas más frutas, hortalizas y verduras, en especial aquellas que contengan hierro, además de propiedades diuréticas. También incluya aquellos alimentos naturales que aporten mucha fibra, para ayudar a agilizar y efectivizar la función del intestino, facilitando la eliminación de toxinas y la asimilación de nutrientes.

No olvide que la principal clave para la erradicación de la celulitis, es la utilización de esa grasa acumulada, la cual es fuente de energía importante que no se ha consumido y se ha atrofiado en esas zonas del cuerpo, debido a la escasa actividad física.

Los mejores ejercicios que ayudan a combatir la celulitis son aquellos que fortalecen los músculos e incrementan la actividad cardiovascular, los que a su vez consumen energía. Elabore una rutina de ejercicios que incluya caminatas intensas de alrededor de 40 minutos al menos 4 veces por semana, ejercicios aeróbicos y localizados, bicicleta, subir y bajar escaleras, natación, etc.

Lo importante es adaptar e incorporar permanentemente estos nuevos hábitos en la dieta y en la actividad física, de forma a prevenir y mantener contralada la acumulación de grasas, toxinas y líquidos debajo de la piel.

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Categorias: Salud
Ultima modificación: 11/11/2013